Moho en el jamón ¿Por qué? ¿Qué es?

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Moho en el jamón ibérico de bellota

Moho en el jamón: un signo de curación tradicional

¿Por qué aparece moho en nuestro jamón? ¿Deberíamos preocuparnos? ¿Cómo eliminarlo y, lo más importante, cómo prevenir su reaparición? En jamonibericodebellota.com, entendemos que la presencia de moho en un jamón puede generar dudas. Sin embargo, lejos de ser un problema, este fenómeno natural suele ser un indicador de una curación lenta, natural y tradicional, un sello de calidad que habla del mimo y el cuidado dedicados a cada pieza.

Desmitificando el moho en el Jamón Ibérico

¿Alguna vez te has topado con una fina capa de moho en la superficie de tu preciado jamón? Tranquilo, no hay motivo para la alarma. Este manto, a menudo blanquecino o verdoso, es un actor clave en la maduración de un jamón ibérico de calidad.

¿Por qué mi jamón desarrolla moho?

Diversos factores pueden propiciar la aparición de moho en el jamón:

  • Envasado prolongado: Un jamón recién llegado a casa necesita respirar. Mantenerlo envuelto en papel sulfurado y funda durante demasiado tiempo puede favorecer la humedad y, por ende, la aparición de moho.
  • Ambiente húmedo: Un entorno con alta humedad es un caldo de cultivo ideal para los hongos.
  • El propio proceso de curación: En muchos casos, la presencia de moho es una parte intrínseca y beneficiosa del proceso de curación natural del jamón.

Moho en el Jamón: ¿Amigo o Enemigo?

¡Definitivamente amigo! Durante la lenta curación, el moho superficial actúa como un estabilizador natural de las grasas, contribuyendo a un proceso de maduración más saludable y auténtico. Este moho, generalmente superficial, no penetra en el interior de la pieza ni representa ningún riesgo para nuestra salud. De hecho, su presencia es un signo de una curación artesanal y prolongada.

Eliminar el moho: un proceso sencillo

Si bien el moho no es perjudicial, entendemos que su apariencia pueda no ser la más apetitosa. Eliminarlo es muy fácil:

  • Humedecer un paño limpio (preferiblemente que no suelte pelusa) con un poco de aceite de oliva.
  • Pasar suavemente el paño por las zonas donde se encuentre el moho hasta que desaparezca por completo.

Prevención: la clave para un jamón impecable

Una vez limpio, el objetivo es evitar que el moho vuelva a aparecer. Aquí te dejamos algunos consejos esenciales:

  • Almacenamiento adecuado: Guarda tu jamón en un lugar seco y oscuro, lejos de la luz solar directa y de fuentes de humedad. Un cubre jamones o incluso la propia grasa del jamón pueden ser excelentes aliados.
  • Corte estratégico: Intenta abrir el jamón solo por una parte. Minimizar la superficie expuesta reduce las posibilidades de que los hongos proliferen.
  • Protección natural: Guarda algunos trozos de la grasa inicial del jamón y utilízalos para cubrir la superficie de corte después de cada uso. Esta capa grasa actúa como una barrera protectora natural sin alterar el sabor. Cubre luego con un paño de algodón limpio.
  • Colgado para una conservación óptima: Si no vas a consumir el jamón de inmediato, mantenerlo colgado favorece una mejor aireación y conservación.

El lenguaje del moho: colores que hablan de curación

Curiosamente, el tipo de moho que aparece en el jamón y su coloración pueden ofrecernos pistas sobre la fase de curación:

Durante el postsalado o asentamiento, es común encontrar mohos del género Penicillium, que prosperan en bajas temperaturas y alta actividad de agua. Estos suelen presentarse con un color blanquecino y se adhieren a la parte magra.

En la fase de secado, con el aumento gradual de la temperatura, pueden aparecer cepas de Aspergillus, que se manifiestan con un color verde y una textura aterciopelada. Tanto el Penicillium como el Aspergillus son los géneros de mohos más habituales en las bodegas de jamón curado, aunque pueden existir otros. Su presencia, aunque visualmente pueda no ser la más atractiva, desempeña un papel fundamental en el desarrollo de la textura y el sabor único del jamón ibérico.

En jamonibericodebellota.com, valoramos cada etapa del proceso de curación, y la presencia de moho es, a menudo, una confirmación de que estamos siguiendo los métodos tradicionales que garantizan la excelencia de nuestros jamones. Así que, la próxima vez que veas ese manto sutil en tu jamón, recuérdalo: es un signo de autenticidad y sabor.

Moho en el Jamón: normalidad, prevención y limpieza

La aparición de moho en la superficie del jamón (serrano o ibérico) es un fenómeno completamente natural y una señal de que ha seguido un proceso de curación tradicional, según los expertos de Ibéricos Casa Lucas. Este moho es superficial y no afecta al interior de la pieza, por lo que no implica un riesgo para la salud en condiciones normales. Solo si el moho aparece dentro de las lonchas o va acompañado de un olor desagradable se debe descartar el producto.

Para prevenir su aparición, es fundamental almacenar el jamón en un lugar fresco, seco y alejado de fuentes de humedad. El truco principal para proteger la zona de corte es cubrirla con un trozo de la grasa retirada de la pieza, que actúa como barrera natural. Si no se tiene, se puede usar papel film o un paño limpio de algodón. También se aconseja abrir la pieza solo por un lado para minimizar la superficie expuesta.

Si se detecta moho, no hay que alarmarse. El método de limpieza recomendado es sencillo: humedecer un trapo limpio en aceite vegetal (oliva o girasol) y frotar la zona afectada, evitando el uso de agua o jabones. Si el moho está sobre la carne expuesta, se debe cortar una capa de aproximadamente un dedo de grosor para eliminar cualquier rastro. Mientras el color, olor y textura sigan siendo los habituales, el consumo tras la limpieza es seguro. Se recomienda consumir el jamón en el plazo de un mes tras su apertura.

Conservación del Jamón Ibérico al vacío para mayor duración

La conservación del jamón ibérico es crucial para mantener sus cualidades organolépticas, y el envasado al vacío se presenta como el método más eficaz para prolongar significativamente su vida útil. Este proceso es ideal para los amantes del jamón que desean tener el producto disponible en su mejor estado durante un tiempo considerable.

La principal ventaja del jamón envasado al vacío reside en la eliminación del oxígeno de su entorno. El oxígeno es el principal catalizador de la degradación y el deterioro de los alimentos, ya que fomenta la oxidación y el crecimiento de microorganismos. Al eliminarlo, el envasado al vacío retrasa considerablemente estos procesos, logrando preservar la calidad, el sabor y las propiedades del jamón durante un período mucho más largo.

Generalmente, el jamón envasado al vacío puede durar entre 3 a 6 meses sin abrir, manteniendo todas sus propiedades intactas. Es importante, sin embargo, verificar siempre la fecha de caducidad proporcionada por el fabricante y considerar las condiciones de almacenamiento.

Conservación tras la apertura

Una vez que el paquete de jamón al vacío es abierto, la exposición al aire obliga a acelerar su consumo. Para asegurar su frescura y sabor, se recomienda consumir el jamón en un plazo de 2 a 4 semanas tras su apertura.

Para la conservación de las lonchas ya abiertas:

  • Envolver: Es fundamental envolver el jamón sobrante en papel film (plástico) inmediatamente.
  • Almacenar: Guardarlo en un contenedor hermético y devolverlo al refrigerador.
  • Objetivo: El objetivo principal es evitar el contacto directo con el aire para prevenir la oxidación y la posible formación de moho.

Alternativa para Piezas Enteras

Para piezas enteras de jamón conservadas a temperatura ambiente, un truco sencillo para prolongar su vida útil es cubrir la zona de corte con un simple film de plástico. Este film, al actuar como barrera contra el oxígeno, marcará una diferencia en la conservación. Un truco adicional es cubrir el film de plástico con la propia grasa del jamón, lo que ayuda a crear una capa protectora natural que mantiene la pieza en perfectas condiciones.

En resumen, mientras que cubrir el jamón con film y su propia grasa es un buen truco para piezas enteras, el envasado al vacío es la técnica más avanzada y efectiva para garantizar que el jamón, especialmente el loncheado, conserve su calidad y sabor de manera óptima durante meses.

Nota importante: aceitedelcampo.com promueve el consumo del aceite de oliva virgen extra por sus cualidades culinarias y beneficios para la salud. No obstante, no debe sustituirse ningún medicamento o tratamiento actual sin la orientación de un profesional de la salud.

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